Cuatro personas, la mayoría mujeres, se dieron a la tarea de invadir momentáneamente la cancha durante la final del Mundial de fútbol en Rusia.
La escena se dio en el segundo tiempo del partido que se disputaban Francia y Croacia, cuando el marcador estaba a 2-1 para los franceses.
Alguna de esas personas incluso saludó a algún jugador en el campo antes de ser sacadas de allí y forzó a que el juego fuera parado temporalmente.
De momento no se ha confirmado la identidad de esas personas, pero el grupo punk Pussy Riot, una de las voces más críticas contra el presidente ruso, anunció que estaba detrás de lo ocurrido, en un comunicado publicado en redes sociales.